7 de mayo de 2019, estadio de Anfield a las 22:55 h de la noche. El árbitro pita el final del partido. Las caras de los jugadores azulgrana son el vivo reflejo de la frustración. El Barça lo tenía todo de frente para pasar a la final tras el 3-0 del partido de ida en el Camp Nou, pero acabó derrotado 4-0 por un Liverpool resurgido de las cenizas que, además, recordamos su himno, never walk alone.

Johan Cruyff dijo en una ocasión que, "los equipos con más hambre son los que ganan las finales", recuerda Vicenç Raluy. "Esta cita me parece clave para explicar la derrota de los azulgranas en Anfield. El Barça tenía, probablemente, más necesidad de ganar que el Liverpool. Pero el Liverpool tenía más hambre que el Barça. Esto, llevado al ámbito de la psicología, lo podríamos traducir así: mientras uno enfocó el partido como un reto (motivación), el otro, lo enfocó desde la necesidad de no fracasar por no repetir la derrota de Roma 2018 (presión, estrés, carencia)"

Y lo cierto es que, los medios de comunicación, y la misma afición, se encargaron de recordar durante días y días, en cada tertulia, que el ridículo que se hizo en la semifinal de Roma no se podía repetir. ¿Aquella necesidad imperiosa de no volver a fallar, ejerció una presión tan grande que terminó condenando los azulgranas?

5 Claves psicológicas para remontar un partido que se ha complicado

1. Aprender de los errores del pasado

Trabajar los fracasos como una oportunidad de aprendizaje, analizar qué ha pasado, por qué ha pasado y qué se puede hacer para mejorar la próxima vez que nos encontramos con una situación similar, es fundamental.

"El Barça fue a Anfield, sin haber aprendido demasiado de lo sucedido en Roma 2018 ni en el partido de ida. Por lo tanto, cuando las cosas se empezaron a torcer y a parecerse a los hechos de Roma, los jugadores se empezaron a bloquear. Entonces, es cuando se pierde la concentración y, probablemente, se empiezan a tomar malas decisiones", afirma Vicenç Raluy.

Y añade: "Hubo una mala valoración cognitiva. Se gestionó la situación como una amenaza, desde el miedo. El mantra era: 'tengo miedo de que vuelva a pasar lo que pasó en Roma'. Y esto es casi una sentencia. Un ejemplo muy banal, si te digo, no pienses en un elefante rosa, ¿eres realmente capaz de no pensar en ello? Inevitablemente, lo piensas. Por lo tanto, cuando tienes una valoración cognitiva de amenaza, todo lo que tienes en la cabeza es lo que no quieres que pase. E, inevitablemente, contribuyes a hacer que pase.

¿Qué se debería haber hecho? Centrarse únicamente en lo que depende de ti, que no es el resultado del partido, si no la ejecución del juego. De este modo, redirigimos la concentración de los jugadores a hacer bien su tarea. "

2. El nivel de activación adecuado

El control de la activación es una función fundamental para la gestión de la ansiedad y las emociones en el deporte. Puedes leer más en el artículo "¿Cómo influyen las emociones en el rendimiento deportivo?"

Según Raluy, "El nivel de activación con el que salieron los dos equipos, era muy diferente. El Liverpool salió con un nivel de activación brutal y con mucho ritmo. No tenían nada que perder y, para ellos, la remontada era un reto estimulante, heroico. En cambio, el Barça salió, o bien con un nivel de activación muy bajo, o bien con un nivel de activación tan alto que se terminó bloqueando."

Y matiza: "Es tentador decir que salieron a jugar sin ganas. Pero cualquier equipo de este nivel quiere ganar una semifinal de la Champions. Por tanto, no podemos atribuir la derrota del Barça en una falta de ganas, sino a una mala gestión del nivel de activación y de la valoración cognitiva.

3. Tener claros quiénes son los líderes del equipo

Los grandes equipos de primera división tienen psicólogos y muchos recursos, pero ¿los usan? ¿Trabajan la psicología sólo a título individual o también grupalmente? ¿El entrenador le da el valor que tiene en la psicología deportiva? ¿Los jugadores creen en ello? ¿Se dejan ayudar o asesorar?

Cuando el equipo está inmerso en una dinámica negativa y de estrés, tener un líder capaz de desbloquear el estado anímico grupal, también es un factor clave. Pero esto es algo que se debe trabajar progresivamente desde la dirección técnica del equipo.

"Hay muchos tipos de liderazgo. Por ejemplo, cuando hablamos del liderazgo en una empresa, los líderes democráticos son ideales. Pero en una situación de crisis, no hay liderazgo democrático, hay un protocolo de actuación. Y este protocolo se debe haber trabajado previamente, se debe haber aprendido a controlar el nivel de activación del grupo y a identificar cuáles son los líderes que ayudarán a sacar el equipo del bloqueo. El día del partido es como el día del examen, ya es tarde para intentar estudiarse la lección ", afirma Raluy.

4. Hablar del 'cómo' y no del 'qué'

Para Vicenç Raluy es importante entender que, en cualquier partido, siempre hay una parte que no depende de ti. Por lo tanto, hay que enfocarse en el cómo y no el qué. En 'cómo' jugaremos y no en 'qué' resultado obtendremos.

"Centrarse en el 'cómo' da confianza a los jugadores, porque depende de ellos. Los ayuda a centrarse en su tarea específica. Por ejemplo, no es lo mismo pedirle a un bombero que apague un incendio como sea, que darle unas pautas de cómo debe de apagar el incendio. Estas pautas (el cómo) ayudan a bloquear las emociones que nos paralizan ante el estrés y centrarse en la ejecución de la tarea. "

5. La clave de todo

Sabemos que los pensamientos afectan las emociones; que las emociones afectan el comportamiento y que, por tanto, las emociones afectan la toma de decisiones. Por eso es tan importante trabajar la psicologia deportiva. En general, podríamos afirmar que los deportistas han trabajado bien su psicología cuando:

• Tienen confianza en sí mismos porque saben que, haciendo bien lo que saben hacer, se multiplican las opciones de conseguir su objetivo.
• Saben manejar el estrés.
• Están motivados y viven los partidos como un reto estimulante, en positivo.
• Son capaces de concentrarse en lo que depende de ellos mismos.

¿Eres futbolista y buscas un lugar donde hacer un stage de calidad? ¡En el Mediterranean Sport Village tenemos todo lo que necesitas!